Salgo a la calle y Nicky Jam está
pegao, Daddy Yankee está pegao, los chamaquitos usan tenis Jordan del 4to
campeonato de los Bulls, Grupo Manía sacó una canción nueva con Elvis Crespo,
Pedro Rosselló baila la macarena en tarima y Manny Manuel huele perico. No, no
estás en 1996. Esta es la situación actual de Puerto Rico en el 2016: bien
quedao en los 90’s.
“Aquel
que no recuerda su pasado está destinado a repetirlo” dice el famoso refrán, y aquel que todavía te saluda con un “Chacho, tú estás más perdío que Rolandito” merece
morir despacito. Puerto Rico es un país que no recuerda bien su pasado y por
eso quiere repetirlo. Un pueblo que tiene
menos memoria que Doris la de Finding
Nemo y el tipo tatuado de Memento juntos
repetirán una y otra vez lo que vivieron alguna vez, o peor aún, lo que creen que
vivieron.
Me gusta comparar la economía de Puerto
Rico con la salud de La Taína: en los 90’s era voluptuosa, llena de energía y
todos querían meterle mano, a diferencia de ahora en 2016 que está seca, jodía
y todos le sacan el cuerpo como si tuviera SIDA. ¿Cómo llegamos a esto? Es como
si la cura del VIH económico la tuviesen las 936 de la carretera número 30
hacia Humacao que se fueron de Borinquen Bella porque en China no hay que pagar
plan médico.
Es normal que en tiempos de depresión
uno recuerde los mejores momentos. Puerto Rico está en depresión económica
desde el 2001 e inconscientemente nos hemos refugiado en lo que creemos fue
nuestra mejor época. Por eso prendes el televisor y ves que Bejuco está
haciendo un “stand up” nuevo y ahora
en vez de flaco y gracioso Miguel Morales es gordo y patético. Es como en Cuba
que todavía hay carros de los 50’s pre revolución andando por ahí, pues en
Puerto Rico por siempre habrán Toyotas Tercel y Mitsubishi Technicas de los
90’s andando por ahí.
Lo peor de todo no es que Nicky Jam tenga un programa de televisión en Comedy Central, ni que Los Rayos Gamma
todavía sigan con sus canciones sosas mientras sus miembros mueren, o que
Raymond Arrieta imite a Don Francisco (aunque eso está cabrón), lo peor es que
todavía salgan hijos de políticos que no dieron pie con bola en la política
criolla debido a su vida nebulosa a defender el bipartidismo.
El hijo de Cuchín escribió que hay que
seguir dándole el voto a los dos partidos que nos han llevado a la quiebra, al
éxodo masivo y a que estén los mismos artistas en la televisión desde 1993.
Digo, ¿me equivoco? Ah ver, ¿cuáles son los únicos dos partidos políticos que
han gobernado en Puerto Rico? ¿Los únicos dos partidos que han manejado el
dinero de este intento de país que nos dejaron? ¿Los únicos dos que han
asesinado opositores ideológicos? El PNP y el PPD son primos hermanos que en lo
único que se diferencian es que unos maman de pie y los otros de rodilla. Más
na.
El bipartidismo portoricencis nos llevó al paisaje gris pesimista cada vez más
vacío de nuestra isla. No hay nada más quedao en los 90’s que seguir votando
por el PPD o el PNP. Tal vez ver el show de Raymond Arrieta te transporte a 1994
o tal vez escuchar el programa de Sunshine en SalSoul se sienta como un eterno
1998, pero apoyar el bipartidismo es peor.
Escribo esto del bipartidismo para que
estén de acuerdo conmigo pero en realidad lo que creo es que todo esto es un
plan de los gringos estilo Dr. Cornelius Rhoads para matar a los puertorriqueños,
¿pero qué carajo sé yo de eso? Odio al chota, compasión al confinado.
Continuemos.
Tal vez por eso la televisión local
sigue con su formato igual sin cambiar desde los tiempos que el merengue estaba
pegao, daban Tus Videos Favoritos en
el canal 18 y los mahones blancos no eran pecado. No le beneficia al status quo quitarle poder a los dos
partidos que siempre lo han tenido. Le beneficia al pueblo. Vota por una de las
otras cuatro opciones si quieres un verdadero cambio en Puerto Rico. Aunque con
la junta de control fiscal que viene estas son las elecciones más innecesarias
en la historia del país y nos llevara no a 1990 sino a 1930 o más pobre aún,
pero eso es tema para otro post.
La
urna es el ataúd para enterrar a la nación puertorriqueña.
Todavía no sé si voy a votar el 8 de
noviembre, pero si lo hago iría al colegio electoral con las patillas como Eros
Ramazzotti, con una camisa FUBU, mahones bieeen anchos, los tenis que decían
bien grande AIR por el lado (los
Pippen), en mi tres potes afueguillo, escuchando Playero 39 y mirando mal a to’
el mundo como si fuera 1996 que esas fueron las elecciones que me grajié a
Michelle la nena gimnasta que estaba bien buena de la calle de Fósforo. ¡Woooo!
Chekeamos.